¡Joooooooodddeeeeeeeeeeerrrrr!..........

Sí señor, eso es afición y el resto son tonteras. ¿En qué clase de eriales has cazado?.... Una cosa sí he aprendido a lo largo de los años con esto de la caza: no por hacer más kilómetros cazas más.
Cuando tenemos por delante tantos o cuantos kilómetros, porque vamos a un cazadero lejano, en seguida empezamos a dejar volar la imaginación, componiendo el monte a nuestro gusto.... que si vaya sitio..., me han dicho...., aquella vez que fue mengano.... Y nos imaginamos el paraíso terrenal con todas las bestias para nosotros solos. Luego llega Paco con las rebajas y el planchazo que nos pegamos es directamente proporcional a las ilusiones que nos habíamos forjado.
En fin, si te has divertido, has desconectado, has estado en buena compañía hablando de cuernos, colmillos y tías, has comido a base de bien, es decir, has tenido más almuerzo que lances, pues... oye, magnífico
Mira mi caso (patético): seis horas, seis, esperando al bicho ese que un amigo quiere que indulte (¡Ja!, como si fuera un marrano encastado), recogida a la media noche con un bocata de jamón (gracias a Dios que me lo sirvieron) y hale, a casa mosqueado con la racha. Y menos mal que la noche no fue como la anterior, en la que por poco no me salieron escamas...
