Mensajepor Niki-ta » 02 Mar 2021 20:11
Por eso mismo no veo noticias desde julio.
No digo lo de párvulo por nadie en particular, pero me rechina que no haya transparencia y nos traten como a tales.
Hace unos años me pasó algo curioso, comencé a tener unos dolores que me fueron anquilosando. Como soy muy bruta seguí con mi vida hasta que en el transcurso de dos años comencé a delirar por las noches, me despertaban unas fuertes corrientes eléctricas que me comenzaban en el coxis, atravesaban toda la columna y me llegaban hasta la cresta sagital. Tenía unos sueños espantosos, aun así me levantaba a las cinco, me tomaba un enantium(o como se escriba)que me servía de bien poco y me iba a trabajar, sacaba a la perra y al final del día tenía que dormir en el sofá porque estaba tan agarrotada que era incapaz de acostarme en la cama.
Me hicieron todo tipo de pruebas y aparentemente no tenía nada fuera de lo normal.
Pensé seriamente que de esa no salía, y si lo hacía, iba a ser en una silla de ruedas. Se me dormían las extremidades y no sentía los pies. Al final, como la medicina no me daba mas solución que atiborrarme de relajantes musculares ( y que conste que no fue por falta de interés por parte de la doctora que me corresponde, que se devanó los sesos), acudí a una masajista que sigue una técnica desarrollada por un cirujano.
No me acarició precisamente, estuve dos meses asistiendo a unas dolorosas sesiones de una hora diaria, yo misma le pedía que me diera toda la caña que pudiera soportar.
Fui recuperándome poco a poco y un día la espalda me comenzó a picar. Pensé que había desarrollado algún tipo de alergia al broche del sujetador, así que los cambié por los deportivos, sin broche. Aquello no se pasaba y fui otra vez a consulta convencida de que tenía un herpes. Así fue, me recetó un preparado de farmacia que ella misma desglosó por ingredientes y cantidades . Pues sabe que no soy muy partidaria de medicamentos, y más después de las ensaladas de pastillas que me habia estado tomando durante casi dos años. Aquel preparado fuue mano de santo. En una semana ni rastro del zoster.
Llegamos a la conclusión de que aquello que me habia hecho encorvarme, que me había dormido pies, piernas, caderas podía haber sido el dichoso virus.
Como fue posible que no me lo vieran ni con ecos ni con ningua prueba? Cosas de la vida. Que llegué a pensar que si aquello me llegaba al cerebro iba a ser irreversible? Pues no lo voy a negar. Pero una cosa aprendí, y es que el día que sea mi hora, la dama de luto se las va a arreglar para encontrarme. Sea covid, un cáncer, un herpes o un accidente.
Lo que no voy a hacer es traicionarme.
Si alguien me da argumentos irrefutables cambiaré de opinión, mientras me quieran hacer chantaje emocional, o me presionen con limitaciones en base a una cartilla sanitaria, más valor dan a mis convicciones.
En cuanto a pensar en los demás, había quedado con dos amigas para comer, una de ellas embarazada. Temiendo que fuera el herpes y sabiendo que es el mismo virus de la varicela, les avisé, les dije que no iba porque temía por mi amiga en estado y por el bebé.
Preferí ser prudente.
Saludos
Te mereces todo lo que hiciste a otros, tú sabrás si te asusta o te hace feliz.
Pensaron enterrarnos sin saber que somos semilla