Misión en Angola. 2da Etapa (1980-1989)

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Las FAPLA habían pasado a ser del brazo armado del MPLA a ser el ejército de la República Popular de Angola. Vestidas con uniformes de camuflaje, abandonando el verde olivo de la primera etapa, cuidaban el territorio nacional. Su arma de plantilla era el fusil automático AKM junto con ametralladora RPK y el lanzacohetes antitanque RPG-7. Sus blindados eran los tanques T-54 y T-55 además de los carros de exploración BTR-152 y de combate BTR-60PB. Su artillería poseía los morteros de 82 y 120 mm; los cañones de 76 mm, B-10 y de 130 mm además de los medios reactivos GRAD-1P y la BM-21. La aviación contaba con los cazas MIG-21U, bombarderos ligeros SU-22 y los helicópteros MI-8. Como medios antiaéreos tenían el lanzacohetes portátil SA-7, el blindado C-2M y el grupo coheteril antiaéreo Pchora.Las tropas internacionalistas de las FAR se encontraban en la línea defensiva Menongue-Lubango-Mozámedes y en centros de entrenamiento para las FAPLA. Contaban con el fusil automático AKM, las ametralladoras livianas RPK y RPD-44 y el lanzacohetes antitanque RPG-7. Tenía de blindados los tanques T-55 y T-55M además del carro exploración BRDM, el carro de combate Maliulka y el vehículo de combate de infantería BMP. La artillería poseía los morteros de 82 y 120 mm; cañones de 75, 122 y 130 mm y las piezas reactivas GRAD-1P y la múltiple BM-21. La aviación cubana contaba con 126 aviones de combate, entre ellos 75 cazas interceptores MIG-21MF que se vio reforzado en el 1984 por 51 cazas interceptores MIG-23 y cazabombarderos MIG-23ML; también tenía los aviones de transporte AN-12 y AN-26 además de los helicópteros MI-8, MI-17, MI-24 y MI-25. Contaban para la defensa antiaérea con el lanzacohetes portátil SA-7, el vehículo de combate ZSU-23-4 Shilka, el Complejo Coheteril Antiaéreo Autopropulsado C-10, la Instalación Coheteril Antiaérea autopropulsada 2K-12 y los grupos Volga

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La sorpresiva debilidad militar demostrada por las Fuerzas de Defensa Sudafricana y el embargo de armas decretado por la ONU preocupó al régimen de Pretoria. Intentando revertir esta situación aumentó el presupuesto militar y se firmaron convenios secretos con países occidentales como Gran Bretaña, Bélgica, Francia e Israel que les permitió adquirir patentes y desarrollar su industria militar. Esto les posibilito autoabastecerse del más del 90% de sus necesidades de material bélico.
En esta etapa las Fuerzas de Defensa Sudafricanas estaban armadas con el fusil automático R-4, la ametralladora SS-77, el lanzagranadas de 40 mm y el lanzacohetes antitanque Milán. Sus blindados eran el tanque Olifant MK-1, las tanquetas AML-90 Eland y Rooikat, los carros de combate de la infantería Ratel-20, Ratel-81 y Ratel-90 y los transportadores blindados Casspir, Buffel y Unimog. La artillería contaba con los morteros de M224, M-29 A1, 82, M30 y 120 mm; los cañones de 106 y 140 mm; el obús-cañón G-5, el obús autopropulsado G-6 y el lanzacohetes reactivos múltiples Walkirie. La Fuerza Aérea Sudafricana (SAAF) se modernizó al adquirir el avión sin piloto Seeker RPV, 100 cazas tácticos franceses Mirage F1AZ y al fabricar 207 aviones de ataque ligeros Impala MK-2, también compraron los gigantes de transporte yanquis C-130 y franceses Trasall y obtuvieron los helicópteros de observación Alouette III, los de combate Súper Frelon y los transportes Súper Puma y Lynx. Su temor hacia la efectiva aviación cubana los hizo adquirir el lanzamisiles portátil antiaéreo Stinger y fabricar el sistema coheteril Cactus Crotale. Llegó a tener ocho bombas nucleares.

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La UNITA se había reorganizado bajo la protección sudafricana. Estaban armados con el fusil automático R-4 aunque no era raro ver a algunos de sus miembros con pistolas ametralladoras UZI o fusiles automáticos AKM. Usaban ametralladoras MINIMI y MAG además de lanzacohetes antitanque Milán y RPG-7. Su artillería era principalmente de morteros de 60, 81, 82 y 120 mm y algunos lanzacohetes reactivos GRAD-1P. Su defensa antiaérea consistía en los lanzamisiles portátiles Stinger y SA-7. Mediante el terror y el crimen intentaba imponerse.
Con el triunfo del republicano y reaccionario Ronald Reagan en los Estados Unidos el régimen sudafricano recibió de nuevo el respaldo norteamericano. Esto les permitió en agosto de 1981 lanzar la Operación Protea con 16 batallones de la UNITA, artillería, tanquetas AML-90 y helicópteros de ataque Súper Frelon contra pequeñas unidades fronterizas de la FAPLA obligándolas a retirarse hacia el norte hasta la región de Cuito Cuanavale. Luego las tropas sudafricanas se retiraron a Namibia dejando el territorio a su títere Jonas Savimbi. Los cubanos permanecieron en la línea defensiva asignada como un valladar infranqueable. En el cielo el 6 de noviembre se enfrentaron una pareja de cazas MIG-21MF contra cuatro Mirage III siendo derribado un caza cubano.
El 2 de agosto de 1983 a las 05:30 horas la UNITA atacó a la aldea de Cangamba. Las fuerzas contrarrevolucionarias estaban conformadas por 16 batallones semirregulares y de cuatro a seis baterías de artillería con morteros. La localidad estaba defendida por la 32 Brigada de Infantería Ligera de la FAPLA y varias pequeñas unidades de la 21 y la 44 Brigada, más algunas decenas de los combatientes de la Organización de Defensa Popular y tropas guardafronteras. Los asesores cubanos se reforzaron mediante un desembarco helitransportado.Los defensores eran sólo 910 combatientes angolanos y 120 cubanos. Sólo contaban con siete morteros de 82 mm, cinco cañones B-10, cuatro GRAD-1P, tres RPG-7 y armas de infantería. Habían construido una serie de fortificaciones entre las cuales había trincheras y refugios.Durante los días 2, 3 y 4 de agosto la UNITA realizó un fuego constante de artillería y morteros. A partir del 6 al 7 intentaron tomar la posición de los cubanos por asalto pero fueron rechazados causándoles grandes bajas. Sobre las posiciones cubanas-angolanas caían diariamente más de 170 proyectiles.
El mando cubano no abandonó a sus combatientes. Aviones de transporte AN-26 dejaban caer municiones y víveres a los sitiados a pesar del intenso fuego antiaéreo de los atacantes. Los cazas MIG-21, desde el aeropuerto de Monongue, dejaron caer unas 400 bombas y 2741 cohetes aire-tierra sobre los fantoches de la UNITA. Mientras los helicópteros MI-17 desembarcaban un destacamento de tropas especiales en la retaguardia enemiga y tres destacamentos blindados avanzaban hacia Cangamba para liberarlos del cerco.La UNITA desistió de intentar tomar el poblado el día 10 luego de tener miles de bajas entre muertos y heridos. Temiendo a las tropas cubanas, que se esforzaban en llegar, abandonaron la posición luego de haber lanzado más de 1500 proyectiles en ocho días sobre los cubanos y angolanos en un área que no rebasaba las 4,5 hectáreas. Creyendo alcanzar una victoria rápida fueron sorprendidos por la heroica resistencia de los combatientes revolucionarios.El 12 de agosto de 1983 Sudáfrica atacó a Cangamba con un raid aéreo con 4 bombarderos Canberra BMK-12 y 4 aviones ligeros Impala MK-2. La lejanía de la base aérea cubana y lo moderno de este nuevo avión sudafricano impidió que los MIG-21 les diera el recibimiento que merecían. Ante esta situación Cuba modernizó sus medios aéreos llegando a Angola los poderosos MIG-23 y MIG-23ML.

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En octubre de 1983 una contraofensiva de la FAPLA logró arrebatarle grandes territorios a la UNITA. Esta se vio obligada a buscar refugio en las selvas centrales y en la provincia de Cuando Cubango, su bastión principal. Allí intentó reorganizarse.A fines de 1983 y principios del 84 el ejército sudafricano realizó la Operación Askari. Esta consistió en ataques aéreos con los cazas Mirage F1AZ y los aviones ligeros de ataque Impala MK-2 sobre tres brigadas de la FAPLA que se encontraban al sur del paralelo 15. La lejanía de estas, a 180 km de las líneas cubanas y su pobre defensa antiaérea las obligó a retirarse más hacia el norte dándole un respiro a la UNITA.En la ciudad de Sumbe, capital de Cuanza Sur, no había fuerzas militares de la FAPLA ni de las FAR. Estaban allí 230 colaboradores cubanos civiles, de ellos 43 mujeres, de la UNECA, salud pública y educación. El lugar estaba defendido por el Ministerio de Seguridad y la Organización de Defensa Popular, especie de milicia angolana, armados con pistolas ametralladoras PPSH, el fusil semiautomático M-52 y un solo mortero de 82 mm. Entre cubanos y angolanos sólo llegaban a 460 efectivos con viejas armas de infantería.Contra esta se lanzó las fuerzas del segundo frente estratégico de la UNITA, bajo las órdenes del Brigadier Joaquín Vivana. Contaban con 1500 hombres distribuidos entre la unidad élite 517 Batallón Regular, la Columna V Congreso, la Columna Regional RM-25 y otras. Estaban armados con los modernos fusiles automáticos R-4, ametralladoras MAG y morteros de 60 y 82 mm.
El ataque comenzó a las 04:30 horas del 25 de marzo en 1984 contra un centro de instrucción del Ministerio de Seguridad y hacia la ciudad. Apoyados por el fuego de los morteros ocuparon un barrio de las afueras, las instalaciones de la Milicia y la Seguridad. Pero el intento de apoderarse del local del MPLA fue frenado por los internacionalistas cubanos, a pesar de ser civiles y tener armas obsoletas.La resistencia cubano-angolana fue tan fuerte que a las 11:30 horas empezó a retirarse la UNITA sin lograr su objetivo. Cazas MIG-21, desde el aeródromo de Huambo, atacaron las concentraciones de tropas fantoches y su artillería que abandonaban la ciudad. Los helicópteros MI-17 evacuaron heridos revolucionarios y desembarcaron tropas aerotransportadas para perseguir a las fuerzas de la UNITA pero fue tan rápida la huida de estas y con tanta desorganización que fue imposible cumplir la misión.

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En 1985, en Cabinda, una patrulla de las FAPLA capturó un comando de tropas especiales sudafricano que intentaba volar las instalaciones petrolíferas de Malongo matando a dos y atrapando a su jefe, el Capitán Winan Petrus Du Toit. La explosión hubiera matado a 118 técnicos norteamericanos, 170 de otras nacionalidades y 811 angolanos.Ese mismo año las FAPLA lanzaron la Operación II Congreso hacia el territorio de la UNITA en el sur. Los fantoches estaban debilitados por los golpes de los revolucionarios y se aprestaban a defender su bastión del sur de Cuando Cubango. El objetivo de elaboración era la ciudad de Mavinga, capital de los fantoches. Los cubanos no estaban de acuerdo con esta operación que se realizaría en territorio conocido por el enemigo y lejos de la retaguardia propia.Los angolanos avanzaron sin dificultad casi sin recibir resistencia de parte de los contrarrevolucionarios. Pero cada vez se alejaban más de su retaguardia agotándose los hombres en la incesante ofensiva y disminuyendo sus recursos. En este estado encontraron a 20 km al norte de Mavinga a los sudafricanos.Estos, como parte de la Operación Determinatión, esperaron a los revolucionarios a la altura del río Lomba. Allí se enfrentaron a la agotada FAPLA con el Batallón Búfalo, la artillería de largo alcance y los aviones ligeros de ataque Impala MK-2. Los angolanos no poseían medios antiaéreos siendo muy golpeados y obligados a retirarse hacia Cuito Cuanavale. La UNITA fue salvada por sus amos.
No aprendiendo de la lección el mando angolano y sus asesores soviéticos volvieron a preparar nuevas acciones para 1987. El 12 de julio comenzó la Operación Saludando Octubre contra las posiciones de la UNITA. Esta se retiraba sin presentar combate y dejando gran cantidad de obstáculos y minas antitanques. Al llegar al río Lombe las FAPLA volvieron a encontrar a los sudafricanos que ahora estaban más fortalecidos.
Sudáfrica denominó esta operación como Moduler. Contaba con 5000 efectivos, tanques Olifant, tanquetas AML-90 Eland y vehículos Casspir. Además estaban apoyados por las Tropas Territoriales de Namibia, fuerza mercenaria namibiana con oficiales blancos y la UNITA. Sus cazas Mirage F1AZ e Impala MK-2 intentaron golpear a los angolanos pero la presencia de defensa antiaérea en las tropas revolucionarias los obligó a elevar su altura disminuyendo su efectividad.La FAPLA logró detener a los sudafricanos e incluso hacerlos retroceder en varios puntos. Por primera vez los tanques angolanos T-54 y T-55 se enfrentaron a los Olifant sudafricanos. Pero el cansancio de los revolucionarios, el agotamiento del parque, la lejanía de la retaguardia y la llegada de nuevos refuerzos al enemigo los obligó a emprender la retirada en los primeros días de octubre hacia Cuito Cuanavale, antigua base aérea de la OTAN. Pero en esta ocasión Sudáfrica los siguió cercándolos y amenazando con aniquilarlos mientras la aviación sudafricana atacaba posiciones de la SWAPO y las FAPLA en Cuando Cubango y la UNITA se reactivaba realizando emboscadas de hostigamiento y de aniquilamiento en el este. Con la destrucción de las unidades que se encontraban en Cuito las FAPLA perderían sus mejores tropas y casi la guerra. Por eso Angola se dirige a Cuba.
Cuba analizó la situación con detenimiento. No era posible usar las fuerzas cubanas de la línea estratégica Namibe-Mononge, de 700 km, porque la debilitaría. Además tendría que atravesar 200 km de selvas por territorio conocido por la UNITA. Por eso se decidieron enviar tropas frescas desde la isla el 15 de noviembre de 1987. Los primeros en llegar fueron los mejores pilotos cubanos a la base aérea de Menongue y 200 asesores en artillería, blindados y otras armas a Cuito Cuanavale.
En esta ciudad se defendían, aunque muy golpeadas las 13, 21, 25, 52, 59 y 66 Brigadas de Infantería de la FAPLA. Mientras en el cielo el piloto Mayor Alberto Ley Rivas en un MIG-23 derriba el 27 de septiembre de 1987 al Capitán Arthur Piercy que piloteaba un caza Mirage IIIAZ. En enero de 1988 recibieron de refuerzo las tropas cercadas en la ciudad a unidades de tanques, artillería e infantería motorizada cubana al mando del General de Brigada Miguel Angel Lorente León. El General de División Leopoldo Cintas Frías llegó desde Cuba para ocupar la jefatura de la Agrupación de Tropas del Sur que incluía a angolanos, namibianos y cubanos.

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La Organización del Pueblo del Africa Sudoccidental (SWAPO) era un grupo guerrillero que luchaba por la libertad de Namibia, colonia de Sudáfrica desde la Primera Guerra Mundial. Su brazo armado era el Ejército Popular de Liberación de Namibia (PLAN) que tenia fusiles automáticos AKM, ametralladoras RPK y lanzacohetes RPG-7. Recibieron entrenamiento de los cubanos y cooperaban con estos y la FAPLA en la lucha contra los sudafricanos y la UNITA.
Los sudafricanos, como parte de la Operación Hooper, realizaban diariamente fuego de artillería con los obuses de largo alcance G-5 y G-6, cañones de 140 mm y medios reactivos como la Walkirie. Tenían allí al Batallón Búfalo que había sido reforzado con fuerzas de la 8va División Blindada, la 44 Brigada de Paracaidistas y el Regimiento de Tanques Presidente Stein. Estaban acompañados de unidades de las Fuerzas Territoriales de Namibia y tropas regulares y semirregulares de la UNITA.El mando cubano reestructuró la defensa de Cuito Cuanavale. Las Brigadas 59 y 25 se acercaron al río Cuito. Estos les permitió resistir los ataques aéreos y terrestres sudafricanos y el inicio de la gran Batalla de Cuito Cuanavale que duró desde enero a marzo de 1988. Entre combates eran hostigados por la artillería sudafricana.
Luego de una intensa preparación artillería, el día 13 de enero de 1988, los sudafricanos lanzan un fuerte ataque contra las posiciones de la 21 y 59 Brigadas de la FAPLA. Tras tres horas de combate logran penetrar hacia la retaguardia de la 21 Brigada. Esta se repliega a posiciones más ventajosas y varias horas después recupera su posición obligando a los sudafricanos a retirarse.
El 14 la observación cubana detecta hacia las 10:00 horas cuatro columnas con 30 tanques Olifant y 60 carros de combate Ratel en orden precombativo hacia las posiciones de las 21 y 59 Brigadas. A las 12:00 horas lanzan su ataque tres batallones sudafricanos acompañados por los tanques y los blindados y hasta seis batallones de la UNITA. Son apoyados por los cazas Mirage F1AZ y los aviones ligeros de ataque Impala MK-2. A pesar de la resistencia angolana los atacantes lograron llegar a la retaguardia de la 59 Brigada que durante dos horas combatió en semicerco. Para recobrar la posición se lanza, por los cubanos, un ataque con tanques T-55 que logran rechazar al enemigo que al atardecer se retira sin lograr su objetivo.

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El 17 de enero llega a Cuito Cuanavale un grupo táctico cubano para reforzar la posición. Rápidamente se realizan varias obras ingenieras que preparan un buen sistema de fortificaciones, trincheras y refugios además que ubican en nichos protegidos los medios bélicos que llegan para fortalecer la posición. El 27 y 29 de enero la aviación de combate sudafricana atacó las posiciones de la 59 Brigada pero el fuego antiaéreo los obligó a retirarse. De nuevo el 3, 4, 6 y 9 de febrero realizan nuevos raid aéreos pero de nuevo son rechazados por los C-10 y las Shilkas derribando a tres aviones.
El día 14 de febrero de 1988 los sudafricanos lanzan un nuevo ataque con tres batallones de infantería, seis batallones de la UNITA y más de 100 blindados entre tanques Olifant, tanquetas AML-90 Eland y transportadores Casspir. Eran apoyados por su aviación de combate y la artillería de largo alcance. Logran romper por uno los flancos la línea defensiva de la 59 Brigada. Los tanques T-55 del Teniente Coronel Ciro Gómez Betancourt contraatacaron a los blindados sudafricanos. A pesar de ser sólo ocho tanques cubanos lograron destruirle 10 al enemigo aunque también perdieron algunos. El propio tanque de Ciro recibió tres impactos pero no se detuvo y prosiguió luchando hasta el anochecer que se retiraron los atacantes.
Hacia el 19 de febrero la artillería de largo alcance sudafricana concentró su fuego sobre la 25 Brigada hasta la madrugada del 20. A las 12:00 horas la UNITA ataca el flanco derecho de la brigada donde son rechazados. Hacia las 12:50 cuatro aviones de combate sudafricanos atacaron a posiciones a 13 km del noroeste de Cuito Cuanavale. Unas horas después otros tres aviones atacan las posiciones del grupo táctico cubano en Longo. El caza Mirage F1AZ del Mayor Edward Every es derribado por una Shilka manejada por artilleros antiaéreos cubanos.

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El 21 de febrero los cazas cubanos MIG-21 y MIG-23 atacan y destruyen una columna de refuerzo sudafricana compuesta de tanques Olifant, carros blindados AML-90 Eland y camiones blindados Casspir. En respuesta de artillería de Sudáfrica incrementa su fuego mientras su aviación bombardea las posiciones cubanas el 23 y 24.Mientras se combatía en tierra en el cielo los sudafricanos perdían el dominio del aire. El 23 de febrero de 1988 el Primer Teniente Eladio Avila Martín en su caza MIG-23 se enfrentó a dos Mirage F1AZ que emprendieron la huida. En la persecución el cubano se dio cuenta que se quedaba sin combustible teniendo que aterrizar en la pista de Cuito Cuanavale donde sé reabasteció de este regresando a Mononge. Esta tarde, a las 17: 35 horas, el Capitán Orlando Carbó descubre un caza Mirage F1AZ y se apresta a presentar combate. Pronto descubre que son tres empezando el enfrentamiento. Los aviones sudafricanos le dispararon tres cohetes pero el MIG-23 los esquiva. Los sudafricanos abandonan el combate huyendo.
Con la ayuda de oficiales zapadores cubanos se instalan campos de minas frente a las defensas de la 25 y 59 Brigada de la FAPLA. Mientras el mando cubano estudia la situación e idea una nueva estrategia. En la noche del día 24 la 59 Brigada se replegó hacia el oeste del río Cuito mientras la 25 ocupaba una nueva posición al este del río pero más cerca del puente.Los sudafricanos no descubrieron la estratagema por lo que en la madrugada del 25 iluminaron con bengalas las posiciones abandonadas por la 25 y 59 Brigada. Dos horas después lanzan su ataque cayendo en los campos de minas. La artillería revolucionaria, principalmente en las BM-21, los golpea fuertemente desorganizándolos. Al intentar evitar el fuego y metralla que les llovía vuelven a caer en los campos minados. Durante toda la tarde intentaron avanzar teniendo que retirarse ya de noche.
Los racistas, el 1 de marzo, lanzan un nuevo ataque contra las posiciones de la 25 Brigada. Nuevamente caen en los campos de minas y bajo el fuego de la artillería de las FAPLA y las FAR. No pudiendo avanzar se vieron obligados a retirarse a las 13:00 horas, 1 de la tarde, con grandes bajas en personal y técnica blindada. No habían podido llegar al borde delantero de las defensas de la brigada.

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Mientras la UNITA y los sudafricanos se desgastaban en Cuito Cuanavale el mando cubano ordenó avanzar por el suroeste de Angola hacia las fronteras con Namibia. La 40 Brigada de Tanques, bajo las órdenes del General de Brigada Enrique Acevedo y unidades de exploración mixtas cubanas-angolanas se desplazaron un silencio desde Palanca hasta Chibemba a donde llegaron el 11 de marzo.En Cuito Cuanavale los días 20 y 21 de marzo la aviación sudafricana bombardeaba las posiciones de la 25 Brigada. El 23 comenzó con asaltos de fuego sobre la Brigada y un poco más tarde un poderoso ataque hacia el flanco derecho pero el fuego directo de la artillería revolucionaria los hace desviar el ataque al flanco izquierdo cayendo en los campos de minas. Tres tanques Olifant y varios blindados quedaron allí. El fuego de la defensa les ocasiona numerosas bajas a los atacantes.
Hacia el oeste del río la UNITA atacó al 3er Batallón de la 13 Brigada de la FAPLA y al norte a un Batallón de la 36 Brigada. En ambos casos fueron rechazados con numerosas bajas. Hacia las 16:00 horas, 4 de la tarde, cesaron los combates aunque el hostigamiento artillero continuó hasta las 22:00 horas, las 10 de la noche. Sudáfrica había perdido la Batalla de Cuito Cuanavale.

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El 6 de abril de 1988 las tropas del General Acevedo habían cruzado el río Cunene llegando a Xangongo. Mientras se terminaba el aeropuerto de Cahama, que permitió la basificación de los aviones de combate y helicópteros más cerca de la frontera con Namibia. Hacia finales de abril la 40 brigada llegó a Donguena.
El día 30 de abril un grupo de exploración sudafricano, que se desplazaba en carros blindados Buffel activo una mina antitanque a dos km del poblado. Los días 2 y 3 de mayo ubicaron una emboscada a los cubanos con una compañía de exploración reforzaba. El 4 una compañía cubana colocó una emboscada a dos km al sur de donde se encontraba la de los sudafricanos. Al estos retirarse de su posición en 12 blindados Casspir caen en la emboscada cubana. Se les destruyeron cinco blindados, se capturaron dos además de hacerles entre 20 y 30 bajas; un herido prisionero, el Sargento Mayor de la Segunda Compañía del 101 Batallón, Julián Papenfus y ocupado numerosos armamentos.
El Estado Mayor de la 40 Brigada de Tanques envió de refuerzo, a los cubanos, dos pelotones reforzados de tropas especiales, un pelotón de BMP, uno de Shilkas y dos cañones de 130 mm. Este no tuvo que combatir porque los sudafricanos huyeron dejando sus muertos, herido y medios bélicos abandonados. Mientras los nuevos sistemas coheteriles antiaéreos autopropulsados cubanos 2K-12 hacían huir del sur de Angola a la aviación sudafricana, principalmente los aviones ligeros Impala MK-2 y los helicópteros Súper Puma.
El 8 de mayo llegó a Tchipa el 82 Grupo Táctico de la 80 Brigada de Tanques cubanos bajo las órdenes del Coronel Restano, entre su técnica contaba el moderno tanque T-62. Hacia el 14 sobrevolaron la posición dos aviones Impala MK-2 sudafricanos que huyeron ante el fuego antiaéreo de los cubanos y la FAPLA. El día 21 una patrulla de exploración, integrada por dos cubanos y cinco SWAPO, perteneciente a un batallón de tropas especiales cubanas fue emboscado por una columna enemiga con artillería y blindados. Los cazas MIG-21 y MIG-23 golpearon a los sudafricanos obligándolos a retirarse.

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Otra patrulla de exploración del batallón de tropas especiales que perseguía al enemigo sostuvo un nuevo encuentro con los sudafricanos. Estos perdieron tres carros Unimog que fueron capturados por los cubanos además de un mortero M-29 A1, una ametralladora de 12,7 mm y una SS-77. Los sudafricanos pertenecían al 32 Batallón Búfalo.El mando superior cubano adoptó una serie de medidas defensivas que reforzó la posesión. Un Grupo Táctico de la Segunda Brigada llegó al lugar. A partir de 12 de junio cuatro grupos de exploración combinada SWAPO, FAPLA y FAR en vehículos blindados BMP actuaban al sur de Tchipa. Hacia el 18 le llegó de Cuba dos grupos coheteriles y poco después se sumó el 85 Grupo Táctico.El 20 de junio a las 18:30 horas, 6:30 de la tarde, los sudafricanos comenzaron a disparar con su artillería hacia el 82 Grupo Táctico. El día 22 de exploración cubana descubre al enemigo avanzar a 18 km al sureste de Tchipa y es enviado un destacamento con tanques, artillería antiaérea autopropulsada e infantería motorizada pero los sudafricanos se retiraron comenzando a disparar con los cañones G-5. Los BM-21 cubanos rispotaron haciéndolos cesar el ataque. Los días 24 y 26 los G-5 vuelven a disparar para ser acallados nuevamente por las BM-21.
El día 27 de junio de 1988 a las 5:00 horas uno de los grupos exploración del Batallón de Tropas Especiales con tres vehículos BMP y 30 hombres, entre cubanos y SWAPO, le montaron una emboscada a los africanos. Estos llegaron en dos carros blindados Ratel comenzando el combate, pronto se sumaron cuatro carros Ratel más mientras los morteros sudafricanos disparaban contra la emboscada. La llegada de dos carros Ratel enemigos de refuerzo no ayudo a los sudafricanos que se retiraron perdiendo cinco carros Ratel, cuatro destruidos y uno capturado, veinte muertos y gran cantidad de armamento. Esta tropa pertenecía al 61 Batallón Mecanizado de Sudáfrica. El 3 destacamento del 82 Grupo Táctico fue enviado para reforzar a los cubanos mientras dos cazas MIG-23, a las 10:45 horas, bombardeaba una columna sudafricana.
La gran concentración de tropas y medios bélicos de Sudáfrica en Calueque parecía indicar un nuevo ataque de los racistas. El General de División ordenó, luego de consultar con Fidel, que dos escuadrillas de cazas bombardearan el lugar. Doce MIG-23ML artillados comenzaron el bombardeo a las 13:00 horas, la 1 de la tarde, mientras el Coronel Pedro Pérez, jefe de la Fuerza Aérea Revolucionaria, comprobaba la orden desde un caza biplaza. El lugar se convirtió en un cementerio, perecieron 50 efectivos sudafricanos, mientras un sobreviviente escribía con un trozo de carbón en una pared. “Los MIG-23 nos partieron el corazón”. Una semana después los tanques T-62 cubanos llegaron al lugar comprobando el destrozo.
El canciller sudafricano Chester Crocker trató de comunicarse inmediatamente con Luanda y La Habana. Se alcanzó un alto al fuego retirarse los sudafricanos al territorio de Namibia e iniciándose las conversaciones de paz. Estas se firmaron el 22 de diciembre de 1988 en la sede de las Naciones Unidas, en Nueva York entre los sudafricanos, estadounidenses, angolanos y cubanos. Se había alcanzado la Victoria en Angola.En estas Namibia alcanzó su independencia que se hizo efectivos en 21 de marzo de 1991 al ganar las elecciones la SWAPO. Los sudafricanos se retiraron de Angola y Namibia viéndose obligados a derogar el régimen del apartheid, política racista donde la minoría blanca explotaba y discriminaba a la mayoría negra, realizando las primeras elecciones multirraciales sudafricanas donde venció el presidente del Congreso Nacional Africano Nelson Mándela. Cuba empezó a retirarse el 11 de enero de 1989 terminando el 25 de mayo de 1991.
Desde 1975 hasta 1991 permanecieron las tropas cubanas en el territorio de la República Popular de Angola enfrentándose a tres movimientos irregulares y dos ejércitos profesionales. Uno de ellos, el sudafricano, el más poderoso de Africa y armado con la técnica más moderna de Europa. La derrota sudafricana en manos de los cubanos sorprendió a muchos en el mundo y a algunos de ellos desagradablemente.Ronald Reagan y George Bush (padre) fueron de los que la derrota sudafricana les supo amarga. En vez de perder Cuba tropas en la Batalla de Cuito Cuanavale y en los encuentros de Donguena y Tchipa, estas habían vencido. Ahora la nación cubana tenía gran cantidad de cuadros y oficiales con experiencias combativas y miles de combatientes que habían recibido su bautismo de fuego. Las FAR había comprobado la efectividad de sus armas en combate real con un enemigo bien preparado y equipado.

[NIGHTSTALKERS]

A ver, Rojo2, es una pena que un buen relato histórico sobre un conflicto lo estropees de esta forma, al no poder reprimirte de introducir múltiples consignas propagandísticas en el interior.
Y es que se nota de que pié cojeas.
El terror aplicado presuntamente, por la UNITA, fué el mismo, en todo caso, que el practicado por el MPLA.
Y los comentarios sobre Ronald Reagan, no tienen nada que envidiarle a los que se pueden hacer sobre los hermanos Castro, virreyes de Angola.

Para que tu relato sea completo, se deberían introducir los siguientes parámetros:

-La guerra costó la vida a unos 5.000 cubanos (el régimen dictatorial marxista de los Castro sólo reconoce unos 2.000).

-Unos 25.000 cubanos resultaron heridos graves ó mutilados de gravedad a lo largo de los 16 años de intervención. Aunque no existen estadísticas oficiales,debido a la censura castrista.

-Los daños psicológicos frutos de la guerra pudieron afectar a unos 100.000 cubanos.-

-Varias enfermedades desconocidas en Cuba, fueron llevadas de vuelta por los excombatientes, entre ellas el VIH.

-La intervención costó no menos de 16.000 millones de dólares al pueblo cubano, que tan sobrado económicamente está, repartidos a lo largo de 16 años de conflicto.

-Cuba sufragó esta intervención ilegal (pues la ONU no la autorizó en ningún momento) en una guerra civil ajena, mediante el intercambio de azúcar y minerales como el níquel, que cambiaba por armamento y logística a la Unión Soviética. Recuerda que no sólo se trata de la guerra en sí, ya algo muy caro, sinó que el desarrollarla a 10.000 km de Cuba, tiene un coste extra muy elevado.

-A raíz de esta intervención, los hermanos Castro, Raúl y Fidel, obtuvieron un beneficio personal propio de unos 500 millones de dólares por cabeza, con motivo de la recompensa que los líderes del MPLA les adjudicaron. Estos fondos están depositados en cuentas secretas en Suiza. Y es que en Angola, abundan los diamantes...a parte del petróleo.

Por otra parte, y aunque el alistamiento en las unidades que partían hacia Angola fuese estrictamente voluntario, incluso para quienes pertenecían al ejército, los que no se alistaban eran considerados unos rajados, unos cobardes, lo que no estaba bien visto en una sociedad tan machista como la cubana.

Sólo los militantes del gobernante Partido Comunista de Cuba (PCC) y de la Unión de Jóvenes Comunistas, organización selectiva considerada la cantera natural del PCC, eran expulsados de sus filas si no aceptaban participar en la llamada "Operación Carlota", la intervención en Angola.

Mira rojo2, lo que yo extraigo de ese conflicto, de forma objetiva y dejando a un lado tus progapandas políticas, es que unos 350.000 cubanos pasaron pon una guerra ajena, que ni les iba ni les venía, simplemente para favorecer los intereses de unos políticos, ya sean los Castro, o los que se hicieron con el poder en Angola, considerado actualmente el 5º más corrupto del mundo.
Porque, ¿me puedes explicar en qué ha beneficiado esta guerra al pueblo cubano?.

PD 1: Los datos acerca de los beneficios personales obtenidos por los hermanos Castro, los he obtenido de Forbes y de fuentes anticastristas, lo cual siempre acepta discrepancias.
Los datos referidos al coste de la intervención así como a las víctimas cubanas, los he obtenido de páginas no gubernamentales, por lo que sus datos pueden ser erróneos.

PD 2: Sigue con los relatos, pero resultarán más amenos e interesantes de leer, si te abstienes de insertarles propaganda política u opiniones personales.
No utilices el foro como un púlpito, será de agradecer.

[meatonthetable]

gracias Rojo2 por ponernos la versión oficial cubana, a aquellos que aunque ya la conocíamos, también hemos leído la oficial surafricana de varias batallas y encuentros.; lo cual sin duda, nos llevará a una interesante discusión histórica sobre los aspectos de este conflicto.

un apunte: la pintada no pone "los MIG-23 nos partieron el corazón".

en afrikaaner, sak van die kart quiere decir, literalmente, saco de basura del camión de la basura, o lo que decimos en español, una mierda pinchada en un palo. para poner la traducción oficial cubana, la pintada debería poner dit he tons hart gebreek

la historia oficial sudafricana señala que en aquellas batallas de 1987 , ocasionaron las siguientes bajas entre sus fuerzas y entre las del FAPLA y las cubanas: (lo tomo directamente de varias páginas en su original en inglés)

"South African losses during operations in support of UNITA came to 31 members of the SADF and 12 members of the SWATF killed and some 90 wounded.

Equipment losses were one Mirage, one spotter aircraft, three Olifant MBTs and four Ratels as well a number of vehicles damaged. The SADF and the SWATF suffered other losses during this period, but these were taken in various operations against SWAPO terrorists and SWAPO facilities in southern Angola. Some of this fighting involved FAPLA elements. UNITA lost some 270 men killed in the southern fighting. FAPLA losses in the fighting which involved the South African forces supporting UNITA, had by 25 February amounted to over 7,000 killed. Equipment losses during this fighting included:

8 MiG-23
4 MiG-21
2 Su-22
8 Helicopters
94 Tanks
94 BMP-1s
64 BTR-60s
32 BRDM-2s
2 BTS-4 tank transporters
4 M-46 130 mm guns
11 D-30 122 mm guns
33 BM-21s
3 BM-14s
7 SA-8 SAM systems
5 SA-13 SAM systems
3 SA-9 SAM systems
33 SA-14 and SA-16 man-portable SAMs
1 ZSU-23-4 SPAA
20 ZU-23-3 AA guns
5 Radar systems
4 Communications vehicles
7 TMM Bridging vehicles
377 logistic vehicles

Minor equipment items lost included one Grad-1P single-122 mm rocket launcher, three B-10 recoilless guns; two 120 mm, fourteen 82 mm and four 60 mm mortars and seven AGS-17 grenade launchers."


la historia oficial surafricana, además, establece que nunca tuvieron más de 4000 hombres sobre el terreno, en ninguna de las fases de la guerra

[NIGHTSTALKERS]

Jo.. Meat, no sabía que dominaras ese dialecto holandés...
La verdad es que cuando he leído lo que ponía en la foto, así como la traducción del pié de foto, he preferido ignorarlo, pues son cosas que tenemos que cojer con pinzas, y mantener siempre nuestros recelos.
Como cambian las versiones, siempre que hay dos en lucha...
Y además, en Angola, no eran sólo dos, pues empezaron siendo 3 frentes guerrilleros, los portugueses, los cubanos (primero sólo como asesores), los del Zaire, de Sudáfrica....menudo lío.

La verdad es que la intervención cubana fué decisiva para la victoria del MPLA, pues a menudo, los Mig ó los tanques cubanos llevaban pintados los distintivos como angoleños, para despistar.
Cuba tenía las manos libres para intervenir, y además, dispuso de unos 50.000 hombres de forma permanente sobre el terreno, mientras que a los de Sudáfrica, la comunidad internacional les observaba con lupa: mercenarios por aquí, embargos de armas por allí, el apartheid, tráfico de diamantes, etc.
Los sudafricanos reconocieron su derrota, pero a un precio irrisorio, comparado con el que tuvieron que pagar los cubanos.

Y es importante recordar, que ni la Unión Soviética ni China ni otros países del Pacto de Varsovia regalaron nada. Sólo Cuba.
Se dice que la mitad de las armas las sufragó Angola, pero es que el gasto fué enorme: armas, desplazamientos, heridos, incapacitados...
Total, para nada.
De todas formas, como bien dice Meat, es importante conocer las dos versiones.

[TURIN]

Lo de antes Rojo2, haz como si no fueras cubano;), veras como llegamos a hacer algo que no entre dentro de la ciencia ficción:(2

[meatonthetable]

no creas Rojo2 que no se aprecia el detalle del esfuerzo, pero lo que nos has contado, es el relato de SIEMPRE que los que llevabos un tiempo en foros de historia militar o de armas hemos leído de usuarios cubanos. con las mismas inexactitudes (la de los Mig rompecorazones me la sé de memoria desde hace más de seis años, o lo de continuar con la famosa, pero falsa historia según la cuenta su historiografía oficial, matanza de Cassinga, que fue investigada con detalle por la Truth and Reconciliation comission, presidida por el premio nobel de la paz el obispo Desmond Tutu, en 1998 (en la que por cierto, los surafricanos no perdieron ningún Puma, visto tras las cuidadosas investigaciones de una fuente tan independiente y de tanta solvencia en guerra aérea como es Tom Cooper)).

sigues además, usando la habitual retórica revolucionaria al usar términos tan despectivos para vuestros rivales surafricanos como "los racistas" o "los imperialistas" o incluso los "agresores fascistas" que he leído en más de un artículo de páginas cubanas.

por el contrario, la historia oficial de las SADF siempre trata con el máximo respeto a sus oponentes cubanos, a los que define como militares capaces y profesionales, pero que en tiempos recientes, ya terminado el apartheid, y con gran parte de los archivos abiertos, amén de la existencia de numerosos blogs de ex-soldados de la época, opone su cualificado punto de vista a una historia con una propaganda excesiva. propaganda, que en nada beneficia a los soldados de su país, que no necesitan de datos falsos, o de ocultación de sus derrotas y graves errores, inevitables por otra parte en cualquier guerra y para cualquier bando. sus hazañas y sufrimientos, sus esperanzas y sus días merecen ser contados, contrastándolos con las reclamaciones de los soldados del otro lado, que lucharon, también con gran profesionalidad y valor, y que no merecen ser menospreciados.

además, y desde casi 20 años, se ha podido contrastar estos hechos históricos con fuentes bien cualificadas: los soviéticos, que tras la caída del muro, y el fin de la URSS, han aportado datos muy importantes a tal extremo. por ejemplo, el antiguo ministro de exteriores, Eduarde Shevardnadze tiene unas reflexiones muy críticas con la política de Fidel en Angola, y en las negociaciones que llevaron a la retirada surafricana y cubana del país, comentó que la mayor implicación de Cuba en el problema angoleño y namibio, con el importante aumento de fuerzas militares, estaba provocando una importante reacción occidental en favor de los surafricanos. además, recuerda que los militares soviéticos estaba considerando el TO como un auténtico fiasco, en el que se estaban quemando hombres, dinero y material sin lograr ningún objetivo tangible y sí mucho sufrimiento.

ni en Suráfrica ni en ningún país occidental se tiene el convencimiento que la intervención cubana supusiera el fin del Apartheid, ni la independencia de Namibia. de hecho, no significó el final de la guerra en Angola, que se mantuvo hasta el año 2002; y donde los surafricanos, ya desde mediados de los 90, estaban abiertamente enfrentados a sus antiguos aliados de UNITA. más bien, estuvo a punto de significar todo lo contrario, pues la intervención de las fuerzas cubanas se vivió como descaradamente imperialista, con un aumento desaforado tanto de los efectivos como de los medios, y estuvo a punto de conseguir, en 1988, el fin del embargo de armas occidental a Suráfrica. el fin del apartheid fue un proceso político interno, posible, no sólo por el aislamiento diplomático, sino también por un importante cambio de mentalidad en la minoría blanca, cada vez más opuesta a un sistema tan profundamente injusto y cruel para con una importante parte de sus compatriotas.

[litomac]

Lo que más me ha gustado del relato es lo de la "heróica resistencia de las fuerzas revolucionarias"

Diosss (perdón que en cuba no está permitido) Fidellll:D:D

Por cierto night, me imagino que el idioma aunque parecido no es holandés si no afrikaner

saludos

[elgur]

je je ,de lejos se les ve el plumero ;)