Las nuevas pistolas extraplanas M&P9 Shield otorgan la seguridad necesaria a los usuarios más desconfiados.
Desde que el ser humano es tal, siempre ha habido diferencias entre lo que nos han aconsejado hacer y lo que hemos acabado haciendo. Si nuestra madre nos decía que nos íbamos a caer, nosotros seguíamos subiéndonos al andamio. Si los instructores de arma corta dictan que llevar una bala en la recámara ayuda a responder a cualquier amenaza real, nosotros lo evitamos por miedo a accidentes.
Es un hecho que tener una bala en recámara es algo que puede salvar vidas, pero a la vez nos hace desconfiar de los mecanismos del arma en momentos de tranquilidad. El miedo a disparar por accidente es real, por mucho que se hayan creado los seguros automáticos. Smith & Wesson ha sido consciente de que en las pistolas de portar ocultas y con sistema de percusión de aguja lanzada, el llevar bala en la recámara confiere esa sensación de inseguridad a mucha gente, incluso personal veterano, por lo que ha desarrollado las pistolas extraplanas M&P9 Shield.
Las pistolas M&P9 Shield tienen seguro automático, reforzado con un seguro manual de aleta en sentido positivo, enrasado con el armazón, para conferirle un control más directo al usuario. La pistola Bodyguard tiene un sistema parecido al de la pistola Shield, aunque en este caso se trata de percusión de martillo oculto, dadas sus minúsculas dimensiones y la tendencia de transportarla en el bolsillo del pantalón.
Como comentario, añadimos que la idea principal para dominar un arma, es sentirse seguro con ella encima. Si no es tu caso, ya deberías de tenerlo claro: pistola M&P Shield
